En la sociedad en la que estamos intentando vivir hay ciertas enfermedades que son vistas como normales y que ya pasan desapercibidas, sin tenerse en cuenta como: el estreñimiento, un mal generalizado que no somos conscientes del daño que puede hacer con el paso del tiempo; el insominio, otro mal muy dañinio para la salud ya que no dejamos a nuestro organismo el tiempo para repararse o regenerarse; cefaleas continuas, un aviso contundente de que hay algo que no funciona bien en nuestro organismo; el famoso colesterol; y así unos cuantos más.
Pero hay una enfermedad que tuvo su auge y su preocupación (salía en todos los medios de comunicación) pero que ahora creo que poco a poco va siendo ‘normal’ y aceptada, es la bulimia con períodos de anorexia. La anorexia físicamente es más difícil de disimular pero una persona bulímica puede pasar totalmente desapercibida porque muchas de las veces sus abusos alimentarios son a escondidas.
Esa ansia, esa compulsión, ese deseo desequilibrado por quererlo todo, por necesitarlo todo, por abarcarlo todo ya no sólo está en la comida. Siento que nuestra sociedad es una bulímica empedernida y que nosotros somos unos bulímicos mentales. Nunca estamos satisfechos, siempre queremos más, y si lo tiene nuestro vecino pues nosotros también (ya sea su coche como su esposa o marido o hijos). En fin, una sociedad insatisfecha que empieza su andadura de satisfacción artificial atiborrándose a comida basura, si, porque el bulímico actual no se atiborrará a caviar o a un buen plato de arroz integral con verduras, lo hará a base de azúcares simples (cholates, bollería industrial…) y grasas saturadas (comida fast-food, salsas grasientas, snacks industriales, helados industriales….).
Pero luego, después de cometer el ‘pecado’ llega el arrepentimiento y qué mejor forma de hacerlo vomitando toda la basura tragada y así seguir autolesionándonos y autoagrediéndonos, pero aquí nadie es libre de pecado…Todo es un círculo que no tiene fin y una vez desaparecido el embuche, pues vuelta a empezar.
Para la Medicina Tradicional China es un problema de Vejiga y su estado emocional alterado sería la falta de voluntad.
Otra manera supuestamente de arreglar nuestros problemas, disgustos, ansiedades o estrés es comiéndonos esas preocupaciones que se convierten en comida y nos la comemos, la devoramos como si así desaparecieran nuestros estados emocionales alterados. Pero el bulímico sabe que ésto no es así ya que no llega conseguir liberarse de su angustiosa vida y que la comida es simplemente un comodín pero no la solución, es como la droga para un drogadicto. Un ejemplo muy sencillo, ¿cuánta gente que ha dejado de fumar ha engordado unos cuántos kilos? Creo que aquí no hace falta respuesta, está bien claro que necesitamos mucho pero que mucho Amor y en mayúsculas por eso la Acupuntura China en estos casos utiliza el punto 8 Ren Mai, llamado Shenque, ubicado justo en nuestro ombligo que es el lugar energético donde se conservó la alimentación perfecta (nuestra alimentación en el vientre de la madre, su calor y su amor) y hace que la persona canalice sus necesidades alimentarias en lo impresicindible y necesario como en la alimentación fetal. Nunca se puntura, se utiliza moxa que se le puede añadir jengibre y sal como en la foto.
Hace unos meses vi un documental sobre el proceso de rehabilitación de unas adolescentes bulímicas-anoréxicas y casi me da algo al comprobar que realmente no les ayudan a entender la buena nutrición y equilibrada, no les enseñan a alimentarse. Había una chica que la presentadora la felicitaba porque ese día pasaba a la ‘fase 2’, es decir que ya no estaba aislada y que podía relacionarse, y era el momento de incorporar a su alimentación el azúcar. Cuál fue mi sorpresa que le dieron una barrita de chocolate comercial para que se la comiera delante de las cámaras y mostrar al mundo entero que ya controlaba la situación (¿qué situación?). Al pegar su primer bocado, la presentadora le preguntó que cómo se sentía a lo que ella respondió: ‘Me siento morir’.
Y le di la razón, pero ni ella ni la presentadora se estaban dando cuenta que volvía a la fase 0 ya que esa niña pronto volvería a consumir compulsivamente toda esa basura industrial por culpa de los azúcares y las grasas hidrogenadas. Nos venden el coche pero se quedan con las llaves. La industria alimentaria y demás industrias (moda, dietética, publicitaria…) nos tienen bien enganchados, y saben perfectamente que aunque vayamos a ‘rehabilitaciión’ siempre volveremos a caer en sus redes.
Así que si queremos sentirnos libres, sé tú quién decide si tomarse la barrita de chocolate o que se la mentan por donde les quepa. Perdonar mi tono pero ésto ya me supera, son muchos casos de adolescentes (nuestro futuro) perdidas en la inmensidad.
‘Bulimia: Terror desesperado. Frenético atiborramiento y purga de odio a uno mismo.
Anorexia: Negación de la propia vida. Mucho miedo. Rechazo y odio hacia uno mismo.’ Louis Hay
Salud y Buenos Alimentos Nutritivos
Yo Isasi
Me siento muy identificada con lo que dices, ya que pasé de ser una estricta vegetariana a una bulímica compulsiva. Se pasa muy mal y a veces todavia creo que tengo ataques de querer comer de todo. También creo que la alimentación tiene mucho que ver con los estados de ánimo, y hay que saber distinguir entre tener mucha hambre y querer comer, a comer por ansiedad. Un saludo.
Gracias Silvia por tu comentario!
Un abrazo!
Muy buen articulo Yo, muy intresante, por desgracia es un tema muy mal informado, que como en muchos casos nose si es peor el remedio que la enfermedad.
Con tu permiso comparto tu articulo en facebook.
Espero que vaya muy bien tu libro, te deseo lo mejor.
Marcos
Hola Marcos! Qué ilusión saber de ti!!! Me alegro que sigas visitándome y que te gusten los posts. Y claro, compártelo en el facebook, yo encantada.
El libro ya va tomando forma, espero que pronto salga a la luz.
Un abrazo muy gordo y sigue cuidándote y aprendiendo.
Yo